Soy quien Dios dice que soy

Cuantas veces hemos permitido que otros planten semillas negativas sobre lo que no podemos hacer.

Comentarios como "no eres lo suficientemente bueno o inteligente, o sin disciplina o talento suficiente".

Hay que deshacerse de esas mentiras, esos no somos nosotros, ya que somos quien Dios dice que somos.

La gente, en especial los desconocedores de Dios y su propósito para con nosotros, son los que quizás traten de decirnos quién no podemos ser o en qué no podemos convertirnos.

Esas declaraciones deben entrarnos por un oído y salir por el otro.

Lo que los demás digan de cada uno de nosotros no determina nuestro destino; Dios sí.

Recordemos y digamonos siempre "Yo no soy quien la gente dice que soy. Soy quien Dios dice que soy".